Se acerca la reapertura de Notre Dame y el Papa estará ausente con aviso
La Catedral de Notre Dame había sido proyectada por los arquitectos Jean de Chelles, Pierre de Montreuil, Pierre de Chelles, Jean Ravy y Raymond Du Temple, comenzó a construirse en 1160 y tomó casi dos siglos. La mayor parte de los trabajos se completaron entre 1260 y 1340.
Desde su inauguración sufrió dos incendios, el primero ocurrió el 24 de mayo de 1871 y el segundo, el 15 de abril de 2019, conmoviendo al mundo, cuando vieron que Notre Dame ardía y al desplomarse su torre de aguja.
En 1871 estalló la revolución de la Comuna y la catedral sufrió la ira de los más alterados; las sillas y bancos de madera se colocaron en una pila en el centro y se les prendió fuego. Notre-Dame estuvo a punto de arder y se hubiera perdido, tal vez para siempre, de no haber sido por la rápida intervención de los parisinos, que acudieron a apagar las llamas.
El arquitecto Eugène Viollet-le-Duc, defensor del naciente estilo neogótico, encabezó un proyecto de restauración que comenzó en 1845 y se prolongó durante un cuarto de siglo; esta intervención, demasiado audaz según algunos historiadores, no solo reparó ornamentos dañados sino que también incorporó elementos enteramente nuevos, como una nueva aguja de 96 metros de altura y las hoy célebres quimeras, y demolió los edificios circundantes.
Luego, el incendio de 2019 causó al edificio daños catastróficos: dos tercios de la techumbre fueron destruidos, la aguja central de Viollet-le-Duc cayó y los rosetones quedaron dañados. Después de arduas tareas realizadas en los últimos cinco años, y mucho antes de lo previsto, el 7 de diciembre próximo, la famosa catedral gótica de París reabrirá sus puertas.
Hasta ahora, las investigaciones no detectaron que el último incendio haya sido un incendio intencional y coincidieron en que el desastre pudo haber sido causado por un mal funcionamiento eléctrico.
Lo que resulta sorprendente, es que el Papa Francisco no estará presente en la reapertura de Notre Dame, siendo ese momento tan significativo para todos los católicos del mundo, que daban por sentado que estaría presente y mucho más sorprende que el 15 de diciembre Francisco estará en la isla del Mediterráneo de Córcega, habiendo rechazado la invitación a la reinauguración de la catedral. Son muchos los que tomaron esa actitud como un desaire aunque otros creen que es hacia Emmanuel Macron y por parte de la Iglesia, justifican su ausencia. El presidente Macron hablará en el atrio en la ceremonia.
Siendo el principal invitado a la celebración, el Papa respondió tajante que no iba a ir y el presidente de la Conferencia Episcopal francesa Eric de Moulins Beafort, dijo que “nunca se habló de que el Papa viniera a la inauguración de Notre Dame. Francisco cree que la catedral es la que debe atraer toda la atención en las ceremonias y no él”.
Algunos obispos también pidieron que no se haga un “juicio de intenciones” al Papa, pero... su excusa resulta tan inaceptable como el no haber venido a su tierra natal, desde que fue nombrado Papa, en 2013, incluso en momentos en que visitó países vecinos y bien podía haber pasado por Argentina.
Susana Espósito - Publicada el Miércoles 27/11/24 - 3170 caracteres
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