OPCIONES DEL MENU
Usted es el visitante |
Rebautizarán la estación Callao de la línea DLa Legislatura porteña aprobó rebautizar la estación Callao de la línea D del subte y sumarle el nombre de Raquel Liberman, una ciudadana polaca que logró escapar y desbaratar una de las redes de trata más poderosas de América del Sur en la década del 30. Liberman había llegado a la Argentina en la década del 20 y fue captdaa por una organización delictiva dedicada a la prostitución; en 1929, la denunció y se abrió una investigación que logró desbaratar la mayor red de trata de mujeres de América del Sur. El proyecto para el cambio de nombre de la estación de subte fue impulsado por la legisladora radical Patricia Vischi (UCR-Evolución) y la estación pasará a llamarse “Callao – Raquel Liberman” y exhibirá cartelería que narre su historia. Vischi basó su iniciativa diciendo: “Diversas investigaciones históricas han dado cuenta de la vida de Raquel Liberman quien fue traída a nuestro país, víctima del engaño y la prostitución, con su valentía enfrentó a la red de trata de mujeres más poderosa de la Argentina, cuyo legado corresponde honrar, y exhibir como ejemplo, al denominar a una estación del subterráneo de la línea D de la ciudad con su nombre, ubicada en una zona donde por poco tiempo, Raquel pudo vivir en libertad”. Esta no es la primera vez que la Legislatura porteña autoriza el renombramiento de una estación de la red subterráneos, de hecho, años atrás se aprobó el cambio en la estación Pueyrredón, pare redimensionar la lucha del colectivo LGBTQ, a través de la figura del activista Carlos Jáuregui. Raquel Liberman nació en la ciudad de Berdychiv, actual Ucrania, el 10 de julio de 1900. Su familia, pobre y numerosa, emigró a la ciudad de Varsovia, en Polonia, en busca de mejores oportunidades. Se casó en 1919 con Yaacov Ferber, con el que tuvo dos hijos, y de quién tuvo que separarse prontamente, porque el hombre emigró a la Argentina en busca de trabajo. Poco tiempo después, Raquel y sus dos hijos se trasladaron a nuestro país para reunirse y estar todos juntos en la localidad de Tapalqué, en la provincia de Buenos Aires. En 1923, Yaacov Ferber murió a causa de la tuberculosis y Raquel debió trasladarse a la ciudad de Buenos Aires en busca de trabajo. Allí fue captada por la red de trata. “En algún momento de su terrible historia, y fuera de la red que la explotaba, Raquel tuvo un comercio en la avenida Callao al 500. Sin embargo, la historia relata que al ser detectada por la Zwi Migdal, la organización que la explotaba sexualmente, la agrupación envió a un hombre que logró engañarla, casarse con ella, robar todos sus ahorros e intentar nuevamente someterla al ejercicio de la prostitución”, sostienen los fundamentos del proyecto recientemente aprobado por la Legislatura. Es en ese contexto, Liberman decidió denunciar en 1929 a la banda que la había sometido y que intentaba captarla nuevamente. Esto dio lugar a la primera gran investigación contra las redes de trata de mujeres en la Argentina y fue el final de la Zwi Migdal, encabezada por Noé Trauman. Antes de que Raquel acudiera a la Justicia, otras 150 mujeres lo habían hecho, aunque sus denuncias no habían sido tenidas en cuenta. Pero fue entonces cuando el juez Manuel Rodríguez Ocampo tomó su denuncia e investigó y encarceló 108 proxenetas y ordenó la captura internacional de 334 prófugos. Finalmente, el 7 de abril de 1935, Raquel falleció de cáncer de garganta mientras sus captores permanecían libres. Sin embargo, a raíz de la repercusión de su denuncia, ese mismo año la Municipalidad de la ciudad de Buenos Aires cerró por decreto todos los prostíbulos, que terminaron por trasladarse a la periferia de la ciudad. Al momento de su muerte, Liberman había logrado volver a reunirse con sus dos hijos y planeaba regresar a Polonia junto a su familia. Cabe recordar que esta heroína fue la que inspiró al personaje que interpretó Eugenia “China” Suárez en la primera temporada de Argentina, tierra de amor y venganza (ATAV), la tira que se emitió en 2019 por Eltrece. La actriz se puso en la piel de Raquel, una polaca que llegaba a la Argentina engañada y con la promesa de casarse, aunque se trataba de una trampa y terminó raptada por una red de prostitución. A lo largo de la tira pudo verse como “La Polaca” logra liberarse de su proxeneta y su lucha para desbaratar otros prostíbulos que funcionaban en la Argentina. Susana Espósito - Publicada el Domingo 10/09/23 Fuente: La Nación - 4380 caracteres |