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Recuperarán El Dorrego, un café notable de San Telmo

El Dorrego es un bar notable situado frente a la plaza homónima, en el barrio de San Telmo, que estuvo cerrado tres años y ya tiene nuevos dueños, que han decidido restaurarlo y ponerlo en valor para que vuelva a abrir sus puertas.

El anuncio se hizo en una preapertura, aprovechando la Noche de los Bares Notables, un evento anual que se realizó el viernes 14 de julio, en el que participaron más de 95 mil personas y El Dorrego participó abriendo sus puertas, exclusivamente para este evento y para anunciar que en pocos meses se reinaugurará.

Situado en la esquina de Humberto Primo y Defensa, el mítico bar Plaza Dorrego, reconocido principalmente por haber albergado un encuentro entre los escritores Jorge Luis Borges y Ernesto Sabato en la década del 70, fue declarado Bar Notable en 2004 y también fue declarado de Interés Cultural en 2011 por la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires.

Acorde al estilo de San Telmo, el barrio más antiguo de la ciudad, con casas bajas con rejas voladas y tejas musleras, calles adoquinadas y su Plaza en la que se pueden comprar objetos y prendas usadas y antiguas y ver parejas bailando tango. Acorde a ese contexto, El Dorrego, también mantuvo su estilo: el piso calcáreo en damero, su antigua barra, las mesitas y sillas de madera, antiguas e incluso muebles en los que se observan cajoncitos que recuerdan los tiempos en que se vendían productos como azúcar, harina y otros, sueltos, al peso.

Hasta su cierre, las mesas estuvieron siempre llenas, tanto de argentinos como de extranjeros que se sentaban a disfrutar de un rico café con medialunas o una cerveza con maníes con cáscara, conservando ese ritual de tener que pelarlos para disfrutar su sabor.

Y cuando muchos habíamos pensado que la modernidad le había ganado la pulseada, sobre todo porque el cierre se produjo al poco tiempo de haberse instalado en la vereda de enfrente, uno de los cafés de cadena mundialmente conocido, el pasado se hizo fuerte y dijo NO, este es mi espacio, mi historia y soy testigo viviente de encuentros y desencuentros, de risas y lágrimas, de tardes de domingo maravillosas, y de guardar los secretos de esas charlas que había en cada mesa y fueron atesoradas por estas cuatro paredes. Por todo eso, El Dorrego reabrirá sus puertas, demostrando que sigue allí, para alegría de los porteños y para que lo conozcan los turistas que visiten San Telmo, donde convivirán en perfecta armonía, lo antiguo y lo moderno, el pasado y un presente compartido.

Ahora, después de la Noche de los Bares Notables, los nuevos dueños junto a Pablo Durán y Daniel Prieto, que lideran el proyecto, comenzarán las obras de recuperación del lugar y puesta en valor, que se estima llevaría aproximadamente un año para que vuelva a abrir.

La idea es comenzar con los arreglos en los próximos meses, conservando toda la identidad y el mobiliario que está adentro intacto. “Calculo que recién el año que viene se podrá abrir porque es un trabajo que tiene mucha restauración, una gran recuperación. Hay que hacer obra y es difícil calcular los tiempos, pero estimo que para los primeros meses del año que viene abriremos”, adelantaron.

“El haber podido adquirirlo y ahora empezar la hermosa tarea de recuperarlo, ponerlo en valor y que vuelva a ser lo que fue es una gran felicidad para mí y para todo el barrio, más los miles de turistas que van a la plaza y no entienden por qué está cerrado”, expresó su nuevo dueño.

Vale la pena recordar que en la planta alta del edificio se encuentra el taller del prestigioso orfebre argentino Juan Carlos Pallarols, autor de célebres piezas de arte, entre ellas cálices papales y bastones de mando de muchos presidentes argentinos.

Susana Espósito - Publicada el Lunes 17/07/23 - 3728 caracteres