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Se recupera Michelangelo
Un histórico espacio del tango porteño

Como parte del proceso de reactivación turística que vive Argentina, recientemente recorrimos la obra de recuperación de Michelangelo, el mítico espacio de tango porteño de la ciudad de Buenos Aires que se encuentra en plena etapa de restauración gracias a la inversión privada y que fue y será un centro de atracción para el turista extranjero.

En ese contexto, Luis "Negro" Machi, quien encabeza este emprendimiento y además lleva adelante "La Ventana Tango", otro espacio en pleno funcionamiento, al lado del edificio de Michelangelo, en pleno casco histórico de San Telmo.

Durante la recorrida, Machi nos comentó detalles del proceso de recuperación del edificio Michelangelo, que data de 1849. Más allá de la puesta en valor del edificio, tendrá diversos sectores distribuidos en diferentes plantas, desde el subsuelo, restaurante buffet, restaurante gourmet y el sector de espectáculos en la planta alta transformado en un verdadero teatro con 205 butacas color negro, combinado con el tapizado. Este espacio trabajará en conjunto con La Ventana Tango convirtiéndose en una opción superlativa para el turista que llegue a la ciudad de Buenos Aires.

Su antigüedad, su arquitectura, y la historia que encierra lo hace hoy un lugar único en toda la ciudad de Bs. As. El terreno que ocupa es parte activa de la historia argentina desde el siglo XVII.

Por excavaciones realizadas en sus sótanos se han podido reconstruir costumbres ya olvidadas de la sociedad colonial.

Según el arqueólogo Daniel Schavelzon el edificio se encuentra ubicado sobre un terreno con larga historia, tan antigua como la ciudad misma, ya que quedó incluido dentro del trazado y ocupación original de la zona céntrica. Cuando Juan de Garay otorgó los solares urbanos a sus acompañantes, esa manzana comprendida entre las actuales calles Belgrano, Balcarce, Venezuela y Defensa, quedó bajo la titularidad de Domingo de Irala y Alonso Gómez, en los solares del lado oeste, y vacía en todo el lado este.

Tanto Irala como Gómez nunca se hicieron cargo efectivo de sus solares y fallecieron lejos de estas tierras. Con los años toda la manzana sería ocupada por la orden de Santo Domingo para su gran iglesia y convento; con ellos se inició la verdadera ocupación del terreno y la historia que, en estrecha relación con ellos, llevaría a construir el edificio de referencia, destinado originalmente a almacenes.

Si bien no está documentado, se supone que el edificio fue proyectado por el ingeniero inglés Eduardo Taylor, representa rasgos muy característicos de éste ingeniero que construyó obras de ese tipo en todo el país en aquella época.

Eduardo Luna - Publicada el Martes 28/12/21 - 2677 caracteres
Fuentes consultadas: Ricardo Sosa y Daniel Schavelzon