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Aniversario de la muerte de Sandro

Hoy se cumplen 11 años del fallecimiento de Roberto Sánchez "Sandro". Ha pasado más de una década y su imborrable recuerdo lo mantiene vivo.

Había nacido el 19 de agosto de 1945 y fue el único hijo de Vicente Sánchez e Irma Nydia Ocampo, ambos de origen español. Vivían en Valentín Alsina (partido de Lanús), una localidad de la zona sur del Gran Buenos Aires, próximo a su lugar de nacimiento, donde transcurrió su infancia y adolescencia. Con el tiempo, se compró una mansión ubicada en la zona residencial de Banfield, ciudad cercana a su lugar de origen, en la que habitó hasta su fallecimiento.

A los trece años abandonó sus estudios secundarios y comenzó a trabajar ayudando a su padre en el reparto de vino en damajuanas. También trabajó de repartidor de una carnicería, trabajador a destajo de una farmacia (droguería) y tornero. Compró a crédito su primera guitarra y en sus tiempos libres, se dedicó a aprender a tocarla y a perfeccionar sus pasos de baile en el escenario.

Su pasión por la música y el baile le permitieron hacer una fabulosa carrera artística, como cantante y además como protagonista de varias películas. Se había convertido en un sex simbol de la década del 60, cautivando a las jovencitas con la mirada profunda de sus ojos negros, sus labios carnosos y sus movimientos pélvicos, un tanto desfachatados para aquellos tiempos.

Alguna vez, en reportajes ha recordado sus comienzos artísticos y dijo: "Yo me nutrí con el rock. Gracias al rock dejé las calles, las navajas y las cadenas, y agarré una guitarra. Dejé la campera de cuero y las pandillas. El rock me salvó. Me salvó de que fuera quizás un delincuente."

Sin embargo, además del rock, interpretó temas románticos que enamoraban a las chicas, o mejor dicho a "sus nenas".

Ha sabido resguardar su privacidad como pocos, su magnífica casa en Banfield ha sido poco menos que un castillo fortificado, de altos paredones que mantenían en secreto lo que allí ocurría. Pero algo que sí permitía, era el ingreso de algunas de sus admiradoras, las nenas, cada año para su cumpleaños. Las recibía y las hacía pasar.

Tuvo varios amores, algunos ocultos y otros conocidos. Vivió 15 años con María Elena y luego convivió con otra mujer, llamada Julia. Finalmente, ya en la adultez y pocos años antes de su triste final, decidió casarse con Olga Garaventa, en 2007. La conoció en la época en que ella se desempeñaba como secretaria del productor teatral Aldo Aresi. Olga fue quien lo acompañó hasta el último día de vida.

El 20 de noviembre de 2009 Sandro fue operado en el Hospital Italiano de Mendoza. Recibió un doble trasplante de pulmones y corazón. Si bien la evolución fue buena, posteriormente tuvo algunas complicaciones que no pudo superar. Una infección generalizada le provocó la muerte.

Los restos de Sandro fueron trasladados a Buenos Aires y el velatorio se realizó en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso Nacional, por donde desfilaron miles de personas que quisieron darle el último adiós. Posteriormente fue sepultado en el cementerio privado Gloriam, ubicado en la localidad bonaerense de Longchamps, situado en la avenida Espora al 4700.

Susana Espósito - Publicada el Lunes 04/01/21 - 3165 caracteres