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    Impuesto a las compras con tarjeta de crédito

    Los Gobiernos se pelean y los porteños pagan los platos rotos

    El viernes pasado se dio a conocer que Gobierno de la Ciudad cobrará un impuesto a los gastos con tarjeta de crédito, para compensar la pérdida de fondos, por la quita de parte de la coparticipación federal.

    tarjetas de creditoLa quita del Gobierno de la Nación a la ciudad repercute en el Presupuesto 2021 presentado por el Gobierno porteño el viernes y para compensar la pérdida de fondos frenará la obra pública y habrá recorte de gastos. Lo malo es que la pelea entre ambos gobiernos castiga a los porteños, que deberán pagar los platos rotos y compensar lo que el oficialismo le quitó a la Ciudad.

    Para compensar la pérdida de fondos, se empezará a cobrar un 1,2% de impuesto a los gastos que se hagan con tarjetas de crédito y además, subirá la carga impositiva para algunas operaciones financieras, renegociará contratos y suspenderá casi la totalidad de obras públicas para bajar costos.

    La medida fue confirmada a través del Ministerio de Hacienda y Finanzas del Gobierno porteño, que comunicó que el Presupuesto de la Ciudad para el año que viene "será de contingencia con fuerte reducción del gasto público" justificando esta decisión y afirmando que "distintas acciones impulsadas por el Gobierno nacional buscan afectar gravemente la autonomía y las finanzas de la Ciudad". Asimismo, manifestaron que este impuesto ya se cobra en la provincia de Buenos Aires y otros distritos.

    El nuevo impuesto se aplicará directamente sobre el total del resumen mensual. No incluye a los consumos con tarjeta de débito. Con esta carga, buscan recaudar $ 7.700 millones anuales.

    También se eliminarán las exenciones de Ingresos Brutos a la compra de Leliqs y a las operaciones de pase entre entidades financieras: con estas dos medidas buscarán recaudar $ 10.600 y $ 1.392 millones respectivamente. ¿Puede provocar que los bancos trasladen este nuevo costo a sus clientes? "Lo resolverá cada entidad financiera", respondieron en el Gobierno porteño.

    Con estas tres modificaciones impositivas la Ciudad apunta a recaudar $ 19.700 millones más. Pero como debe compensar una caída de $ 52.000 millones, el mayor esfuerzo lo tendrá que hacer con la reducción del gasto público, de por sí exigido por lo que demanda la atención de la pandemia.

    Adiós a los importantes proyectos de Rodríguez Larreta que tan entusiasmado lo tenían. Habrá que cancelar y en otros casos postergar la mayoría de ellos: la compra de vagones de subte, el traslado de la cárcel de Devoto, la puesta en valor del teatro Alvear, el proyecto del Parque de la Innovación en Núñez, el desarrollo del Distrito Joven en la Costanera Norte y la urbanización del predio del Mercado de Hacienda una vez que se concrete la mudanza del complejo ganadero a Cañuelas. Tampoco habrá nuevos tendidos de Metrobus ni de ciclovías.

    El tema es que hay gastos que son muy importantes, como la compra de equipamiento para la Policía y otros asignados a la salud, educación y desarrollo social, aunque aseguran que dichos gastos están protegidos.

    Habrá que renegociar contratos de servicios públicos, algunos de ellos multimillonarios. Entre otros, la recolección de residuos, el mantenimiento de hospitales y del espacio público, y los servicios de vigilancia privada en distintas instituciones.

    El Gobierno porteño también contempla devolver oficinas que hoy alquila, para reducir costos operativos. Eso lo obligará a consolidar el home office como método de trabajo entre los empleados estatales.

    En tanto, las autoridades porteñas adelantaron que la negociación paritaria deberá darse en este contexto de ajuste, y prometen que los sueldos más altos serán los que hagan "el esfuerzo mayor".

    Cabe recordar que el cierre de comercios y la caída de la actividad económica también causan un perjuicio en la recaudación de la Ciudad.

    Al anuncio de la quita de la coparticipación, Rodríguez Larreta respondió con una demanda ante la Corte Suprema por lo que entienden que fue un decreto "inconstitucional" firmado por el Presidente. Por el momento, la Corte no se expresó sobre el tema, no obstante, el kirchnerismo impulsará en el Congreso la ley para reducir aún más la coparticipación que recibe la Ciudad y volvería al 1,4% que recibía antes de la gestión de Mauricio Macri.

    La primera quita implicó una baja de $52.000 millones y de aprobarse esta nueva medida la suma ascendería a $65.000 millones. La vicepresidente de la Nación, Cristina Kirchner, había dicho que venían por todo y está cumpliendo.

    Mientras tanto, el Gobierno porteño confía en que la Corte Suprema le otorgue el recurso de amparo. También, que no progrese en el Congreso la ley que profundiza la quita, que ya tiene media sanción del Senado. "Si eso sucede y recuperamos los fondos que le corresponden a la Ciudad, nuestro compromiso es revertir las medidas de ajuste", aseguró el ministro porteño de Hacienda, Martín Mura.


    Susana Espósito - Publicada el Lunes 23/11/20 - 4872 caracteres - Fuente: Clarín