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Da lo mismo que sea cura, colchonero, rey de bastos, caradura o polizón
Debido a la cuarentena por la pandemia de Covid-19 y viendo que algunos funcionarios que estaban en prisión, salieron en libertad, argumentando el riesgo de contagio, hubo motines en distintos penales, exigiendo los mismos derechos que por ejemplo le tuvieron en cuenta al ex vicepresidente, Amado Boudou, quien salió de prisión y cumple arresto domiciliario.
Se ha generado una crisis carcelaria debido a que Boudou, no encuadra dentro de los grupos de riesgo, ni por edad, ni por enfermedades preexistentes y aún así, recibió el beneficio de la prisión domiciliaria.
Los motines también se produjeron en varios penales del interior del país, pero el más enardecido fue en la cárcel de Devoto, donde rompieron los techos, provocaron incendios.
Ahora, quien también reclama el derecho a la prisión domiciliaria es el padre Grassi, quien había sido condenado a 15 años por abuso sexual y corrupción de menores. El "todavía cura" alegó problemas respiratorios pero hasta ahora, parece que su pedido no fue tenido en cuenta, ya que la querella aseguró que no pertenece a la población de riesgo.
La mayoría de los argentinos estamos totalmente en contra de la decisión tomada por la Cámara de Casación Penal bonaerense, que habilitó las prisiones domiciliarias en medio de la pandemia del coronavirus covid-19, dándole el beneficio a delincuentes y asesinos. Incluso, ya hubo algunos casos de estos beneficiados con la domiciliaria, que al día siguiente de salir, volvieron a delinquir. Esto generó que el viernes 30 de abril, los porteños y también los argentinos de otras provincias manifestaran en contra de la inexplicable decisión, a puro cacerolazo.
El pedido de Grassi fue formulado al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) número 1 de Morón y en la misma, el religioso alega un problema respiratorio y temor a contagiarse del covid-19, según lo informado por el abogado Juan Pablo Gallego, quien fuera querellante en la causa.
En el pedido también se indica que un oficial penitenciario del penal de Campana donde está preso Grassi contrajo el coronavirus.
El abogado, en declaraciones al canal TN, aseguró que fue sorprendido por el pedido ya que entiende que "Grassi no integra ningún grupo de riesgo".
Para el Tribunal, Grassi fue responsable del abuso del menor "Gabriel", hecho que habría tenido lugar en la "Casa San Juan Bosco" de la Fundación, en Hurlingham, y los mismos promovieron una "desviación en la sexualidad aún en formación del menor". En cambio, Grassi fue sobreseído en los casos de abuso y corrupción de menores sobre "Ezequiel" y "Luis", algo que también quedó firme tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia.
Los hechos por los cuales Grassi fue llevado a juicio trascendieron a la opinión pública a raíz de un informe del programa Telenoche Investiga, y el primer caso fue el de "Gabriel", tras los cuales se sumaron otras más que llegaron a un total de 17.
Además, Grassi fue condenado en noviembre del 2016 a dos años de prisión por malversación de caudales a raíz que pagaba con los fondos que manejaba la Fundación Felices los Niños, una vivienda que el cura habitaba en la zona.
Parece mentira que esta pandemia sigue poniendo de manifiesto el aprovechamiento del poder que siempre fue moneda corriente en la gestión kirchnerista, dejando de lado los derechos de las víctimas y favoreciendo a los victimarios.
Como dice la letra del tango Cambalache, siempre vigente: da lo mismo que sea cura, colchonero, rey de bastos, caradura o polizón, cualquiera es un señor, cualquiera es un ladrón... Pero lo terrible es que quienes más roban y delinquen, más beneficios tienen, en este mundo del revés en que lloran las víctimas y los asesinos son liberados por un juez.
Susana Espósito - Publicada el Lunes 04/05/20 - 3756 caracteres
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