OPCIONES DEL MENU
Usted es el visitante Desde 01/01/2016
|
Transformaciones de la ciudad: las macromanzanas
En los últimos años, el Gobierno de la Ciudad se ha propuesto hacer de Buenos Aires una ciudad más amigable y para ello peatonalizó muchas calles de la ciudad que han favorecido un mejor y más seguro desplazamiento de los peatones, regulando el flujo vehicular.
Este plan de peatonalización incluyó la regularización de velocidades máximas más estrictas, veredas anchas, esquinas espaciosas, más árboles, iluminación LED y mobiliario moderno.
Ahora, a los efectos de seguir mejorando la calidad de vida de los vecinos, la convivencia, el tránsito, la seguridad vial y el medio ambiente, se han incorporado cinco nuevas áreas con prioridad peatonal:
Microcentro, Tribunales, Retiro, Once y la emblemática Calle Corrientes, que se sumaron al clásico Casco Histórico. Estas áreas peatonales son también conocidas como "macromanzanas" y cambiaron el paisaje de la Ciudad.
Además, generan una mejora en la infraestructura urbana: nivelación de calzadas, recuperación de veredas, mejoras en la iluminación de las calles, instalación de estacionamientos para bicicletas y paradas de colectivos y la colocación de nuevos canteros, bancos y luminarias.
El 80% del Microcentro ya es peatonal. En la zona, 63 de las 76 cuadras que lo componen fueron renovadas para disminuir la circulación de vehículos, facilitar el desplazamiento de los peatones y el uso de la bicicleta. Además, el transporte público fue redirigido hacia las avenidas.
Este Plan Microcentro ha favorecido en cuanto a los valores de ruido de la zona, que están ahora dentro de los límites máximos permitidos por la Ley 1540: 70 decibeles. Entre las acciones que se llevaron a cabo también se encuentran la nivelación de las calzadas y las veredas, la colocación de contenedores soterrados para mejorar la limpieza de las calles, la renovación de las fachadas de los edificios históricos y el cambio de las luminarias por tecnología LED. Además, se agregaron ciclovías e incorporaron nuevos árboles.
Es importante recordar que también se promovió el desarrollo comercial de la zona de Once y que el peatón se sienta seguro, con una mejor utilización del espacio público. Para ello, ordenó la logística de carga y descarga, mejoró el mobiliario y destacó el patrimonio arquitectónico, unificando y ensanchando las veredas, soterrando contenedores y cables, mejorando el arbolado y la iluminación y ordenando la publicidad exterior.
El plan contempló la intervención entre las avenidas Pueyrredón, Corrientes, Rivadavia, Uriburu y el entorno de Plaza Miserere, un punto de conexión clave para el transporte público donde confluyen las líneas de subterráneo A, B y H, varias líneas de colectivos y la estación de tren de la línea Sarmiento.
En Retiro, en el área comprendida entre Libertador, Juncal y Pellegrini, se nivelaron 3.890 m2 de calzadas, se plantaron 93 árboles y se agregaron 145 luminarias y 886 bolardos, entre otras intervenciones. Hoy circulan menos autos, bajaron los niveles de contaminación sonora y el barrio recuperó su fisonomía de paseo.
La obra tuvo tres etapas, entre las cuales se sumaron más de 5.000 metros cuadrados peatonalizados. El proyecto puso también en valor las fachadas del Museo Fernández Blanco y de la iglesia del Socorro, para lograr una integración al paisaje urbano proyectado en la zona. Si bien la zona no está restringida a los vehículos, se estableció una velocidad máxima de 20 kilómetros por hora.
Parte de la avenida Corrientes se transformó en un paseo peatonal, donde todas las noches, a partir de las 19 y hasta las 2 AM los peatones pueden disfrutar de este paseo en el que se encuentran gran cantidad de teatros, bares, librerías. A lo largo de esta intervención de 34.000 m2 se revalorizó el espacio público, renovando y ensanchando 14.100 m2 de veredas, y sumando 5.750m2 de superficie peatonal y áreas de descanso. En el centro se incorporó un bulevar que agregó verde a la avenida. Corrientes mantiene su espíritu y esencia.
Tribunales debe ser, después de la esquina de Florida y Corrientes, uno de los lugares por donde más gente circula en la Argentina. En esta zona se logró devolver a los vecinos las tres plazas, que hoy pueden disfrutar en todo su esplendor. Comprende la zona delimitada por las calles Corrientes, Uruguay, Córdoba y Cerrito. Se pusieron bancos, se recuperó infraestructura, se agregaron bicicleteros, se plantaron árboles y se ganaron 4.470m2 de espacios verdes. Además, se recuperó un área peatonal para el disfrute de los vecinos, donde históricamente había un estacionamiento de autos.
La intervención se completó ordenando la feria de libreros en la Plaza Lavalle y poniendo en valor la fachada de la Escuela Roca, una joya arquitectónica de 1903, que tras un trabajo minucioso y prácticamente artesanal, hoy realza aún más la fisonomía de la zona. También se hizo lo propio con el Conjunto CIRA de la Congregación Israelita de la República Argentina.
Las nuevas áreas peatonales se sumaron a los trabajos realizados previamente en el Casco Histórico sobre las calles Perú, Tacuarí, Moreno, Alsina, y el Pasaje 5 de Julio. Incluyeron la nivelación de calzadas, recuperación de veredas, instalación de estacionamientos para bicicletas y paradas de colectivos y la colocación de nuevos canteros, bancos y luminarias. También se reconfiguró el espacio destinado al tránsito peatonal para favorecer la diversidad de actividades y promover su función social como lugar de encuentro.
El Pasaje 5 de Julio pasó a ser peatonal, para lo cual se realizó una nivelación de acera y calzada, se colocaron farolas históricas como iluminación peatonal. También se instaló una pantalla interactiva con datos históricos del lugar, información sobre la obra y agenda de actividades tanto de la Ciudad como de locales comerciales, culturales y centros de estudios vecinos al pasaje, además de una conexión gratuita de WiFi.
Susana Espósito - Publicada el Martes 02/07/19 - 5882 caracteres - Fuente: La Nación
|