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Aniversario de la muerte de Dante Alighieri

Dante Alighieri fue un destacado poeta y prosista que había nacido en Florencia en 1265. Una de sus destacadas obras fue La divina Comedia y basándose en ella, un empresario textil, Luis Barolo mandó a construir un palacio que lleva su nombre, en Avenida de Mayo. El escritor falleció el 14 de septiembre de 1321, en Ravena y este sábado se cumplirán 698 años.

El Palacio Barolo, fue proyectado por el arquitecto, Mario Palanti, a pedido de Luis Barolo, quien aspiraba a salvar las cenizas del Dante y traerlas a la Argentina. El Barolo iba a ser un homenaje, pero también un imponente mausoleo. Sin embargo, solo concretó el primero de sus posibles destinos u hoy es posible contemplar en la planta baja, una réplica de la escultura diseñada para aquel hipotético y frustrado sepulcro americano.

El edificio está dividido en tres ejes: Infierno (la planta baja), Purgatorio (piso 4 al 14) y Paraíso, al que habrá que llegar por escalera, seis pisos después. Allí se encuentra el mirador y dos pisos más arriba está el faro, que estuvo apagado durante 70 años, hasta que fue reparado en 2010 y desde entonces volvió a funcionar.

Palanti fue también quien construyó el Palacio Salvo, en Montevideo, que es gemelo del Barolo y la idea del arquitecto fue que se produjera un arco lumínico entre Buenos Aires y Montevideo: la luz del Barolo encontrándose, en algún punto del Río de la Plata, con la del Palacio en la capital uruguaya. Se dice que la Cruz del Sur se alinea, en los primeros días de junio, con la estructura del edificio. Y el mito más dice que bienaventurado el que ascienda, por esas fechas y a las 19.45, hasta el último de los 100 metros del edificio de Palanti, porque cada una de las estrellas de la Cruz del Sur brillará solo para él.

De acuerdo a la Historia, hubo varios mausoleos que pretendieron albergar los restos de Alighieri, que al morir, fueron depositados en un pequeño mausoleo en Rávena, ciudad donde murió. Doscientos años después, en Florencia se construyó un importante mausoleo, en la iglesia de la Santa Croce y el Papa León X, mandó traer las cenizas del Dante, pero Rávena desobedeció la orden y envió un féretro vacío. Los restos del poeta habían desaparecido.

Algunas historias locales cuentan que estaban ocultos en un convento franciscano en Rávena, hasta que a mediados del siglo XIX fueron redescubiertos y preservados desde entonces en un sobrio mausoleo de mármol, junto a la Basílica de San Francesco, en una discreta calle de la ciudad, lejos del constante asedio de los turistas.

Susana Espósito - Publicada el Miércoles 11/09/19 - 2566 caracteres