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Restituyeron la escultura de Horacio Ferrer

Hace pocos días, se restituyó la escultura del poeta Horacio Ferrer, emplazada en la vereda de la Academia Nacional del Tango (Av. de Mayo al 800), fundada por él. Había sido vandalizada en el mes de febrero y ya ha sido restaurada.

La escultura fue realizada por el artista plástico, Eduardo Noé y había sido inaugurada el 2 junio de 2015, coincidiendo con la fecha de cumpleaños. El acto de vandalismo la redujo a escombros.

Cabe recordar que en Buenos Aires hay varias esculturas que rinden homenaje a grandes figuras del tango, que también fueron víctimas de vandalismo, entre ellas, dos obras realizadas también por Eduardo Noé: una de Beba Bidart, situada en la vereda de Taconeando, lugar de cena y show de tango fundado por la artista, había sido robado en octubre de 2014, por dos individuos que luego fueron detenidos. A pocos metros de allí, en la esquina de Chile y Balcarce, se encuentra la escultura de Mariano Mores, a la que en diciembre de 2015 le cortaron las manos.

Estos actos de vandalismo injustificados generan indignación, pero lamentablemente ocurren muy seguido y la restauración de los monumentos genera un importante gasto de dinero que podría destinarse a obras muy necesarias en la ciudad.

La escultura de Ferrer fue restaurada por el equipo de Monumentos y Obras de Arte (MOA), que se ocupó de preservar y revincular las piezas que componen la escultura.

Horacio Ferrer ha sido vecino de Recoleta, vivió en el Hotel Alvear y ha sido muy reconocido por sus pares. Entre sus más de doscientas obras, podemos destacar: Balada para un loco, Chiquilín de Bachín y la operita María de Buenos Aires. Falleció en diciembre de 2014, a los 81 años y su escultura volvió a ese lugar que él amaba tanto, la vereda de la Academia Nacional del Tango.

Susana Espósito - Publicada el Miércoles 27/09/17 - 1811 caracteres