Esplendor y ocaso de los parques de diversiones

Los parques de diversiones han atraído siempre a grandes y chicos. Dentro de los mismos existían juegos y diversión para todos los gustos, pero, con el correr del tiempo, los que había en Buenos Aires cerraron y solo queda un recuerdo.

El primero de ellos fue el Parque Japonés, proyectado por el arquitecto Alfredo Zücker (1852-1913), nacido en Suiza que también diseñó el Plaza Hotel. El parque, inaugurado en 1911, estaba situado en Av. Libertador y Callao, en el barrio de Retiro. Fue considerado a nivel mundial una obra maravillosa. En diciembre del 1930 cerró a causa de un incendio.

En el año 1939, en los terrenos donde hoy está el Hotel Sheraton, se construyó el segundo Parque Japonés, también conocido como Parque Retiro, situado en el área comprendida entre Leandro Alem, San Martín, Eduardo Madero y la prolongación imaginaria de Marcelo T. de Alvear.

Era una típica feria de atracciones que mezclaba juegos de tiro al blanco con atracciones mecánicas, tenía además un circo con diversos espectáculos entre los cuales se encontraba la exhibición de ciertos fenómenos humanos como enanos, mujeres barbudas, faquires, etc. A finales de la década del 50 se produjo una declinación económica que de a poco llevó a que el parque fuera cerrado y demolido en el año 1961.

En 1960 se inauguró el Ital Park, que funcionó en el predio de Recoleta donde había existido el primer parque japonés. En sus primeros años, se imponían simples hamacas, toboganes y calesitas. En los 70, atracciones mecánicas como la Vuelta al Mundo, el Tren Fantasma y las tazas colombianas o las pistas como AutosSprint. En los 80, los juegos ganaron en vértigo y furia, con el Laberinto del Terror, una nueva montaña rusa de nombre temible (Corkscrew, el sacacorchos) y el tristemente célebre MatterHorn.

Durante la década del 90, el país vivía una hiperinflación que propició el posterior cierre de este fantástico parque que muchos aún recuerdan.

En esos años hubo además algunos problemas, como un accidente que sufrió una mujer, en la pista de autos Super Monza, que la dejó con una lesión medular y debieron indemnizarla; también en 1989 hubo un incendio provocado por un cortocircuito y la gota que colmó el vaso fue cuando el 29 de julio del 90, una niña de 15 años, Roxana Alaimo, sufrió un accidente en el MatterHorn, una especie de calesita en la que coches unidos a un eje central giraban a toda velocidad. Después de las primeras vueltas, el carrito 12, donde iba la jovencita con una amiga, se desprendió y golpeó contra una de las barreras protectoras.

Las dos jóvenes fueron atendidas allí y trasladadas al Hospital Alemán. Roxana murió casi al instante por traumatismo de cráneo. Karina se fracturó el tobillo izquierdo, y sufrió un esguince en el pie derecho, golpes y heridas cortantes en la cabeza. Pasó varios días internada, pero vivió.

La Justicia dispuso la clausura provisoria y ordenó pericias. Cuando el INTI habló, desnudó tanto la fatiga de materiales y los arreglos improvisados como la carencia de inspecciones adecuadas. Casi todas las atracciones presentaban peligros potenciales. Los porteños tenían a la vista una mezcla de falta de escrúpulos empresarial con negligencia o complicidad oficial.

La clausura judicial duró algo más de tres meses. A principios de noviembre del 90, el juez Marcelo Arias la levantó y el parque reabrió un fin de semana, pero prácticamente no tenían público. Finalmente el 12 de noviembre, la Municipalidad dispuso la clausura definitiva.

El predio donde funcionaba el Ital Park se convirtió en un espacio verde. Allí se encuentra, hoy, el parque Thays y simplemente, queda el recuerdo de aquel parque que estuvo allí para alegría de muchos y desgracia de otros.

El Parque de la Ciudad, también conocido como Interama, estaba en Villa Soldati, se inauguró en septiembre de 1982 como el primer parque temático del país. Constaba de cinco áreas: Latina, Carnaval, Futuro, Fantasía e Internacional, por donde se distribuían los juegos.

Ocupaba una superficie total de 120 hectáreas. Sus instalaciones más características, entre otras, eran la Torre Espacial de 208 metros de altura, la montaña rusa Aconcagua, la Gran Rueda Doble "Scorpion" y la montaña rusa de acero de circuito doble Vertigorama, que fue la única en su tipo en el mundo.

A finales de octubre del año 2003 el parque de la Ciudad de Buenos Aires fue cerrado por decisión del Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Aníbal Ibarra, con la promesa de reabrirlo luego de realizar algunas remodelaciones y actualizaciones menores; el parque entonces permaneció cerrado durante cuatro años.

Fue reabierto en 2007, pero al año siguiente cerró definitivamente y en la actualidad, funciona allí, Ciudad Rock. El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires desmanteló el Parque de la Ciudad e invirtió más de cincuenta millones de pesos, gasto a cargo del presupuesto comunal.

Ciudad Rock fue concebida para realizar los grandes recitales de música de artistas nacionales e internacionales. Se inauguró el 28 de septiembre de 2013, Día del Reggae.

Susana Espósito - Publicada el Viernes 13/05/16 - 5083 caracteres