Remodelarán el Hotel Plaza

El Hotel Plaza, situado en la calle Florida 1005, en el barrio de Retiro, fue adquirido por el Grupo Alvear y según informaron, a principios de 2017, cerrará por dos años para ser modernizado.

Se estima que las obras demandarán ese tiempo y mientras tanto, toda la actividad del emblemático hotel se trasladará al Alvear Icon, en Puerto Madero, que será inaugurado en 2017.

El Plaza perteneció hasta ahora a los herederos de la famlia Tornquist y según trascendidos, su nuevo dueño pagó 280 millones de pesos, finalizando con la compra el gerenciamiento de Marriott, condición que impuso el comprador para no quedar atados a ninguna cadena, según explicó Andrés Kalwill, director de Nuevos Proyectos del grupo Sutton, que también tiene el Alvear Palace Hotel, el Alvear Art Hotel, Galerías Pacífico y un porcentaje del Llao Llao.

El Hotel Plaza fue el primer cinco estrellas en Buenos Aires, mandado a construir por el empresario, Ernesto Tornquist. Fue proyectado por el arquitecto alemán, Alfred Zucker, especializado en arquitectura hotelera.

Se inauguró el 15 de julio de 1909 y contaba con todos los lujos y comodidades como una central telefónica, ascensores, agua fría y caliente, aire acondicionado en el restaurante (con ventiladores sobre barras de hielo) y la novedad de lo que se conocía como ropero americano o placard. En sus instalaciones también se fabricaba hielo, tenía imprenta, tapicería, ebanistería, platería (hacían hasta los botones de los uniformes del personal) y hasta un colchonero que en 1964 se encargó de confeccionar una cama especial para el presidente francés Charles de Gaulle, que medía casi dos metros.

El edificio fue modernizado en 1934, tuvo una ampliación entre 1942 y 1948 y antes del Mundial de Fúbtol de 1978 fue ampliado nuevamente por los arquitectos Clorindo Testa y Héctor Lacarra.

Allí se alojaron importantes personalidades como por ejemplo:
Juan Pablo II, los astronautas que pisaron por primera vez la luna, el Sha de Persia y su esposa y también Pavarotti, para quien por única vez, reformaron una habitación contigua a la suya, transformándola en cocina, ya que al tenor no le gustaba salir a comer afuera y prefería cocinarse.

Estuvo nominado entre los mejores nueve bares de hotel del mundo (según la revista Forbes) y el Grill, restaurante que mantiene su servicio “a la rusa”, que supo ser escuela de los mejores chefs del país.

Susana Espósito - Publicada el Lunes 30/05/16 - 2405 caracteres