Aires de Cambio en el Centro Cultural Kirchner

El Centro Cultural Kirchner fue una costosísima obra realizada durante la presidencia de Cristina Kirchner. Se refuncionalizó el antiguo Palacio de Correos, que había sido proyectado por el arquitecto francés, Norbert Maillart e inaugurado en 1928.

Ya convertido en Centro Cultural, la ex presidenta lo había inaugurado el 21 de mayo de 2015 y según el flamante titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, fue una obra que costó tres mil millones de pesos, con los cuales se podía haber construído una Usina del arte en cada provincia de nuestro país.

Si bien Lombardi ha dicho que es un espacio que tiene la opulencia y la calidad de los museos más distinguidos de Europa, al que convertirá en el "faro cultural del hemisferio Sur", también es cierto que al hacerse cargo del mismo, también encontró un organismo acéfalo, con obras sin terminar y una legión de empleados fieles a la gestión anterior, que quieren mantener la "cultura" del organismo con impronta kirchnerista y, ante todo, sostener sus fuentes de trabajo.

Ante esta situación, Lombardi desvinculó a 600 empleados a quienes les vencieron los contratos temporales y eso generó la queja de los mismos, que incluso decidieron convocar a una manifestación a realizarse el jueves 7 de enero, frente al edificio, para reclamar la continuidad en sus puestos de trabajo.

Según la nueva gestión, se trata de personal cuyos contratos culminaron el 31 de diciembre y por eso se decidió no renovarlos. Lombardi le pidió a los gremios intervinientes que en los próximos días le acerquen planillas con los datos de estos ex empleados "para hacerles entrevistas, conocer cuáles eran sus funciones y analizar quiénes tendrán continuidad en la nueva gestión". Según su cálculo, para funcionar, el CCK necesita a 400 empleados y especialistas con conocimientos curatoriales.

Como es de público conocimiento, el Frente para la Victoria, antes de finalizar su gobierno, nombró una gran cantidad de empleados en distintos espacios gubernamentales, como por ejemplo el Congreso de la Nación, donde el ex presidente Amado Boudou designó a 2 .035 empleados que había pasado a la planta permanente del Senado, durante el año pasado y ahora, la vice presidente, Gabriela Michetti, los dio de baja, fundamentando que "No es posible que un desmadre administrativo del Senado caiga sobre la espalda de los propios trabajadores. Y de los contribuyentes." Asimismo, creó una comisión que revisará 2317 recategorizaciones de personal que el ex vicepresidente firmó en la recta final de su mandato.

En las últimas semanas Lombardi y un reducido equipo realizaron un informe con el estado de situación del lugar. Se verificó que de la planta heredada, el 85% tenía contratos temporales triangulados con las universidades de San Martín, Tres de Febrero y La Matanza. El 15% restante -que hoy sigue en el staff- está contratado bajo el marco de la ley.

El 81% de las designaciones fue en 2015, de las cuales el 42% fue realizada en la segunda mitad del año. Y el 100% ingresó sin ningún tipo de concurso ni evaluación previa.

Dentro de las novedades del Centro Cultural Kirchner, se estima que reabrirá sus puertas el 4 de febrero, con visitas guiadas y los conciertos comenzarán en el mes de marzo. La entrada general seguirá siendo gratuita.

El espacio que ocupó hasta ahora una muestra de Néstor Kirchner se convertirá en una galería "de todos los presidentes" y conservará la oficina de Evita, que recrea con enorme grado de detalle la gestión que tuvo la ex primera dama durante los tres meses que trabajó en el ex correo.

El nuevo director del Centro Cultural será Gustavo Mozzi, ex titular de la Usina del arte.

Susana Espósito - Publicada el Jueves 07/01/16 - 3720 caracteres