Construirán autopista subterránea

El martes 5 de abril, el Gobierno porteño presentó el proyecto "Paseo del Bajo", una obra vial subterránea para camiones y micros, que liberará de tránsito la zona de Puerto Madero y Retiro.

Este emprendimiento que tendrá 4 carriles exclusivos para ese tipo de vehículos, será el enlace de la Autopista Illia con la Autopista Buenos Aires-La Plata e integrará Puerto Madero con la ciudad e incluirá la tan demorada Autopista Ribereña.

De esta manera, el tránsito pesado tendrá un camino que unirá las citadas autopistas y la terminal de micros de Retiro, sin que los camiones y buses tengan que circular por la avenida Huergo/Madero ni por la zona de Retiro.

Los camiones que entren desde las autopistas por el sur tendrán bajadas hacia una rampa a la altura de Carlos Calvo, donde comenzará la autopista soterrada. La traza correrá debajo del espacio de 52 metros de ancho que queda entre Huergo/Madero y Alicia Moreau de Justo, y donde hoy funcionan un par de edificios públicos, canchas de fútbol, estacionamientos y otras instalaciones que desaparecerán. También dejará de existir el fallido tranvía de Puerto Madero, aunque se mantendrá la vía del tren de carga que va de Retiro a Dock Sud.

Esa autopista subterránea será sólo para el tránsito pesado, y tendrá dos carriles por lado. Desde el sur hasta la altura de la calle Perón tendrá espacios a cielo abierto, pero luego quedará totalmente bajo tierra y con un pequeño desvío para no pasar por debajo del edificio Guardacostas, el ITBA y el Luna Park. Luego tendrá otra rampa en Retiro, donde habrá tres posibles salidas: un desvío para micros hacia la terminal, una conexión para el Puerto o un empalme con la autopista Illia para seguir hacia el norte. Esta obra beneficiará a 10.000 camiones y micros por día.

Para el tránsito liviano, que son otros 15.000 vehículos diarios, el esquema será así: Alicia Moreau de Justo tendrá cuatro carriles, todos en sentido hacia Retiro. Los dos más cercanos a los docks serán comunes, mientras que los otros dos, separados por un bulevar, serán para el tránsito pasante. Del otro lado será igual, con dos carriles hacia el sur para el tránsito rápido y otros dos para la circulación común sobre Madero/Huergo, en sentido hacia la autopista Buenos Aires-La Plata.

El jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta dijo que ésta será la obra más importante que se hizo en mucho tiempo.

Por su parte, el vicejefe, Diego Santilli, agregó: "El proyecto contempla la creación de 60.000 metros cuadrados de espacio verde, lo que equivale a dos veces la superficie del parque Lezama". Esto es realmente una interesante propuesta, ya que los espacios verdes son los que menos abundan en nuestra ciudad.

Esta será una intervención urbana integral, ya que además de contemplar lo relacionado con una mayor fluidez del tránsito, que muchas veces no puede avanzar, por la dificultad que implica la circulación de tantos colectivos y camiones en la zona y además se incluirán techos con canteros y árboles, ciclovías y veredas, estaciones aeróbicas y otras instalaciones, que serán aprovechadas por los porteños, aplicando este nuevo concepto de unir la ciudad con el río, cambiando la forma en que nació y creció Buenos Aires, de espaldas al río.

El Gobierno porteño prometió hacer el llamado a licitación en julio para comenzar la obra en noviembre, y terminarla en marzo de 2019. Se trata de una construcción muy compleja y carísima: costará 650 millones de dólares, de los cuales 400 vendrán de un préstamo de la Corporación Andina de Fomento y el resto de la venta del playón ferroviario que está al lado de Catalinas Norte, donde se habilitaría la construcción de oficinas.

Susana Espósito - Publicada el Martes 12/04/16 - 3687 caracteres
Fuente consultada: Diario Clarín