Hallazgo histórico en Chubut

El miércoles 14 de enero, dos investigadores del Centro Nacional Patagónico en la localidad de Camarones, provincia de Chubut, encontraron un ancla que pertenecería al buque Villarino, en el que habían sido trasladados los restos del general San Martín.

Los científicos, Alejo Irigoyen y Gastón Trobbiani, estaban realizando estudios de prospección submarina, utilizando un equipo de video remoto y según explicaron a los medios, al analizar las grabaciones observaron una estructura extraña que se trataría de un ancla de tipo de almirantazgo que podría ser la del Villarino, aunque existen algunas dudas, como por ejemplo el cepo o barra superior, que es de madera y la del mencionado buque era de hierro.

Estas anclas con cepo de madera fueron fabricadas hasta finales del siglo XVIII y si bien pudieron coexistir los dos tipos de anclas, las distancias que hay abren el interrogante de si se trata de un barco aún más antiguo.

Trobbiani sostuvo que "el hallazgo podría significar un aporte al acervo histórico y cultural de la localidad de Camarones", y agregó: "Tenemos expectativas de que los expertos en la materia puedan aportar más datos para tener una mejor idea de a qué buque puede haber pertenecido y qué historia se oculta detrás del ancla".

El ancla encontrada estaba en la zona Islas Blancas y la sospecha de que podría pertenecer al Villarino, se debe a que a unos mil metros del lugar donde se encontró, fue donde naufragó el buque y al pie del ancla, había tendida una cadena muy larga.

En febrero se espera a especialistas en arqueología submarina para realizar "un relevamiento del sitio para ver de qué tipo de madera es el cepo y aportar mayor información".

San Martín falleció en Boulogne Sur Mer-Francia, el 17 de agosto de 1850. Su cuerpo fue embalsamado y el día 20, poco después de las seis de la mañana, acompañado de un reducido cortejo que se detuvo, para un responso, en la iglesia de San Nicolás y continuó hacia la catedral de Nuestra Señora de Boulogne, donde sus restos fueron depositados en la cripta catedralicia. Allí reposarían hasta su traslado, en 1861, al panteón familiar en el cementerio de Brunoy.

Casi treinta años después, sus restos fueron repatriados y llegaron a Buenos Aires en el buque Villarino, el 28 de mayo de 1880. Quedaba cumplido el deseo testamentario de que su corazón fuese depositado en Buenos Aires. Aquí esperaban y recibieron a esos restos gran cantidad de argentinos encabezados por Avellaneda, Mitre y Sarmiento, los tres ciudadanos que hasta ese momento habían ejercido el mando presidencial en Buenos Aires y desde entonces, el Padre de la Patria descansa en la Catedral Metropolitana.

Cabe destacar, que en uno de los laterales del Instituto Sanmartiniano, puede observarse la caña de leva del transporte Villarino, al que podría pertenecer el ancla hallada en Chubut.

Susana Espósito - Publicada el Jueves 29/01/15 - 2861 caracteres