Protegen edificios de valor patrimonial

El jueves 2 de octubre, en la Legislatura porteña, se votó una ley, por unanimidad, que protegerá a 1773 edificios de valor patrimonial.

Hace tiempo que se evidencia una toma de conciencia en cuanto a conservar edificios de la ciudad que tienen valor por su particular arquitectura, por haber tenido importancia para nuestra historia, por el destacado arquitecto que los proyectó u otros motivos y se trata de evitar que sean demolidos como ha ocurrido con algunos edificios, de los que hoy lamentamos su desaparición.

La Ley votada ampara esa cantidad importante de construcciones públicas y privadas por ser consideradas de importancia arquitectónica y cultural. Todas han sido construidas antes de 1941 y muchas de ellas han estado a punto de ser demolidas.

Los 1.773 edificios fueron catalogados con un nivel de protección estructural y cautelar: esto significa que no se puede alterar sus fachadas, la tipología, los elementos básicos que le dan forma y articulación y, básicamente, protege la imagen característica del área para prevenir transformaciones en el tejido y la morfología barrial.

Esto ocurre mucho en varias ciudades europeas, donde se conservan sus fachadas, aunque en su interior, los dueños tienen derecho a realizar cambios y dotar de modernidad su vivienda.

Algunos arquitectos no están de acuerdo con esa postura, ya que consideran que es una manera de convertir a las ciudades en museos, pero otros tantos apoyan la idea, ya que es parte de la cultura de cada país y consideran importante conservar ese estilo que les da identidad.

En un expediente especial, se catalogaron 52 edificios representativos del Movimiento Moderno, una expresión arquitectónica que brilla en Buenos Aires como en pocas ciudades del mundo. Uno de los ejemplos más destacados, y ahora catalogado, es el Teatro Gran Rex (en Corrientes 857), del arquitecto Alberto Prebisch y otro es el edificio de la Embajada de Chile, en Tagle 2762.

También forman parte del listado de edificios protegidos, grupos de casas pegadas unas a otras, con fachadas y balcones muy ornamentados, como ocurre en el Pasaje El Maestro, en el barrio de Caballito y lo mismo ocurrió en el barrio de Recoleta, en la cuadra de avenida Santa Fe al 1600, donde se protegieron ocho construcciones.

El conjunto de leyes pasó dos veces por el recinto, y también se debatió en audiencia pública.

Susana Espósito - Publicada el Viernes 03/10/14 - 2392 caracteres