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Despidieron a Jorge Ibañez, el diseñador de ilusiones
El viernes 14 de marzo, la noticia sobre la inesperada muerte del modisto, Jorge Ibañez, sorprendió a todos, ya que su apariencia siempre fue de un hombre vital, alegre y disfrutando de la vida como pocos saben hacerlo.
Cerca del mediodía, al no responder al timbre, la persona que hacía la limpieza en su departamento de la calle Esmeralda 1038, en el barrio de Retiro, dio aviso a la policía y al SAME, que al llegar al lugar, descubrieron el cuerpo sin vida del modisto, al lado de su cama, vestido con ropa deportiva, por lo que se intuye que estaba por salir a entrenar, como todas las mañanas.
La autopsia, realizada ese mismo día a las 19 horas, arrojó como primer resultado, que el motivo de esa muerte súbita fue debido a una cardiopatía. Según algunos testimonios, Jorge sufría de hipertensión.
El velatorio se realizó el domingo 16, en el barrio de Belgrano, debido a que su única hermana está radicada en Colombia y esperaban su llegada.
Todos los testimonios que salieron a recordar a Ibañez por televisión coincidieron en lamentar su muerte tan joven, a los 44 años, la pérdida de un número uno de la moda, pero lo más importante es los valores que resaltaron como ser humano, generoso, alegre, trabajador, alguien que nunca criticó a nadie, amante de las mujeres a las cuales quería vestir y hacerlas sentir diosas, destacando lo mejor de su figura y disimulando lo que no estaba tan perfecto.
Tres de sus mejores amigas, que estaban realmente devastadas son Florencia de la V, Anamá Ferreyra e Ingrid Grudke, quien el día sábado, en un desfile que se realizó en Tigre, a pesar de sentirse muy dolorida por haber perdido a su gran amigo, hizo el cierre del desfile, notablemente compungida, conteniendo las lágrimas e incluso, mirando hacia el cielo y lanzando un beso destinado a Jorge.
El lunes, cerca del mediodía, el cortejo fúnebre arribó a la Iglesia del Pilar, donde se hizo una misa de cuerpo presente y luego una gran cantidad de familiares, amigos, colegas y gente que se acercó al cementerio, acompañó el féretro, conducido por sus padres, con gran respeto, hasta su morada final, un nicho, donde se depositaron sus restos y para despedirlo, Sandra Mihanovich le cantó dos de sus temas preferidos: “Soy lo que soy” y “Quereme”.
Entre los presentes en el cementerio estuvieron Carmen Yazalde, Teresa Calandra, Evelyn Scheild, Anamá Ferreyra, Claudia Segura, Nequi Galotti, Ingrid Grudke, Florencia de la V y tantos otros que fueron elegantemente vestidos (como le gustaba a él) para despedir e ese hombre, creador de tantas ilusiones, de esos vestidos que hacían que las mujeres se sintieran verdaderas reinas.
Susana Espósito - Publicada el 18/03/14 - 2681 caracteres
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