Fallecimiento de la jueza Carmen Argibay

Luego de haber permanecido internada varios días en el Instituto del Diagnóstico, el sábado 10 de mayo, falleció a los 74 años, la jueza, Carmen Argibay, quien padecía una enfisema pulmonar y problemas cardíacos.

Sus restos fueron velados en el Palacio de Tribunales, donde fue despedida por familiares y amigos. Luego fueron cremados en un cementerio privado de la localidad bonaerense de Pilar.

Funcionarios judiciales y miembros de la Corte Suprema, como el presidente del tribunal, Ricardo Lorenzetti, acompañaron a la familia, desde que se dio a conocer la noticia del deceso.

El gobierno nacional también se puso a disposición de la familia de la jueza, según informó el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien además le envió condolencias a la familia de la primera magistrada mujer, en democracia.

La vicepresidenta de la Corte Suprema de Justicia, Elena Highton de Nolasco, asistió el sábado al velorio y destacó que la jueza "siempre fue objetiva e independiente, nunca se dejó llevar por nada y por nadie". "Estoy muy compungida, impactada", dijo la magistrada, y recordó a su par como "una luchadora por los derechos de la mujer, fue la líder en esto".

El domingo, antes de ser trasladados los restos de la jueza, a su última morada, a las 11.30, se realizó un homenaje del que participaron el titular del máximo tribunal, Ricardo Lorenzetti, la vicepresidenta de la Corte, Elena Highton de Nolasco, y los ministros Carlos Fayt, Enrique Santiago Petracchi, Juan Carlos Maqueda y Eugenio Raúl Zaffaroni.

Carmen Argibay nació el 15 de junio de 1939. Estudió en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, y se recibió de abogada el 11 de junio de 1964. Trabajó en varios juzgados públicos y enseñó Derecho en muchas universidades, hasta 1976, cuando fue enviada a prisión. Posteriormente, al recuperar su libertad, se dedicó a la abogacía, en forma privada. Fue nombrada jueza, durante el gobierno democrático de Raúl Alfonsín, el 7 de junio de 1984, y ascendida en 1988 y, nuevamente, en 1993. En junio de 2001 fue nombrada por la Asamblea General de las Naciones Unidas como jueza ad litem en el Tribunal Criminal Internacional que juzgó crímenes de guerra en la ex Yugoslavia. Se jubiló el 1 de enero de 2002.

Llegó a la Corte Suprema en febrero de 2005, luchó por los derechos de la mujer y fue defensora del aborto.

En 2008, Argibay recibió el Premio Konex-Diploma al Mérito como una de las cinco jueces más destacadas de la década en la Argentina.

Argibay era integrante de la Asociación Internacional de Derecho Penal, y miembro fundadora de la Asociación Internacional de Mujeres Jueces, organización que presidió desde 1998 hasta 2000.

También fundó la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina, formó parte del Tribunal Internacional de Mujeres sobre Crímenes de Guerra para el Enjuiciamiento de la Esclavitud Sexual, que condenó en diciembre de 2000 al ejército japonés por los crímenes cometidos durante la Segunda Guerra Mundial, donde se sometieron mujeres de distintos países a la esclavitud sexual.

Susana Espósito - Publicada el 12/05/14 - 3076 caracteres