Muestra de caballos en la Rural

El martes 5 de abril abrió sus puertas al público la muestra "Nuestros Caballos" en La Rural del barrio de Palermo, que permanecerá abierta hasta el sábado 9. Se trata de la séptima edición de una muestra que congrega a los actores más importantes de la industria equina en América Latina.

Se presentan más de 110 expositores y 800 ejemplares de las principales razas que se lucen en la gran pista central.

En el día de la inauguración se destacaron dos caballos de gran porte, bellísimo pelaje y elegancia al andar, que fueron traídos desde Holanda e Irlanda respectivamente. Se trata de las nuevas razas de tiro Frisón o Frisona, y de la Irish Cob o Tinker, también conocida como Gypsy Vanner, cuyos cuatro únicos ejemplares en el país servirán ahora para cruza, embriones y servicios. Al Frisón se lo usa para adiestramiento, doma clásica o espectáculos circenses, por su docilidad, inteligencia y rapidez de aprendizaje. El Irish Tinker, de la familia de los pintos, es reconocido como raza recién en 1996 luego de años de ser arduamente usado en la cosecha de papas y otras tareas en el campo.

También pudo verse al primer caballo clonado y nacido en el país, bautizado con el nombre de Ñandubay. Es un ejemplar de raza criolla, nacido en agosto pasado, en la provincia de Buenos Aires. Es un caballo manso y por demás mimoso, que los chicos podrán acariciar y hasta alimentar.

En cuanto al interés tanto deportivo se presentan ejemplares de las razas Cuarto de Milla, Arabe, Polo Petiso Argentino, Tiro y Silla Argentino, Percherón, Appaloosa, Paint Horse, Criollo y Peruano de Paso.

La exposición funciona como un gran centro de negocios para criadores, deportistas, productores y comercializadores de insumos, y como un imán para los amantes del campo y los caballos.

Es un paseo interesante para toda la familia, ya que los más chicos tienen allí diversión asegurada en la escuela de equitación Hipocampo, que facilita la primera experiencia de los niños con petisos y ponies. Los coleccionistas tienen allí además la muestra y remate de 34 carruajes antiguos, en la que descolla un Mail Break del 1900, con todos los accesorios de época: desde canasto para sombrillas hasta faroles. Mientras, para el público general hay un sinfín de stands con productos artesanales a buenos precios: desde mates cincelados a comestibles como vino patero, jamones serranos, quesos, salamines y bondiola. Y, por supuesto, productos en cuero de altísima calidad.